¡Gracias Presidente!

Por: Orlando Viera Blanco

El presidente Chávez pasará a la historia como otro mandatario que logró reforzar en el mundo y en sus propios seguidores, la idea de que el socialismo igualitario es un modelo económico utópico e inaplicable, que poco contribuye a la creación de un verdadero Estado próspero y de derecho, sino a un real estado de derroche y de privilegios a sus camaradas.

El capitalismo -es cierto- arrastra grandes desniveles. En Europa el déficit de la Zona Euro es de dos billones de euros desde el 2007, es decir, el equivalente al PIB de Francia o al 11% del monto de la deuda de los 27 países de la Unión. El desfase tiene su origen en el endeudamiento exagerado de algunos países de la UE. Bien... sin embargo es justo rescatar, que a la par del déficit de España, Grecia, Italia o Portugal, estas naciones salieron de lo rural a lo industrial. Otros países como los del Telón de Acero, que hasta ayer vivían en el más profundo oscurantismo, ahora van a la cabeza de la producción de chips (Lituania, Letonia), acero (Rumania); son destinos turísticos de primera (Estonia, Checoslovaquia o Hungría) y líderes en nanotecnología (Ucrania). El déficit que comporta la UE, es verdad, es una odisea por la que tendrán que navegar la canciller Merkel y el presidente Sarkozy, tenedores de las mayores porciones de deuda de los países del Club Mediterráneo. Sin embargo tal desproporción capitalista, ha traído avances apreciables como espléndidas autopistas, puertos, redes hospitalarias; modernos polígonos industriales, homologaciones académicas, elevación de los estándares de vida, multiculturalidad y una innegable ampliación de los niveles de riqueza y de libertad.

En Venezuela después de más de un billón de dólares en un lustro de socialismo, todos vamos para menos y para abajo... Nuestra moneda es agua y sal, y nuestro petróleo se ha ido por las cañerías de un triste e impune despilfarro. El nivel de endeudamiento es vergonzoso, tanto por la cifra como por lo injustificado e inapreciable de la gestión. El socialismo chavista sólo hace gala de una costosa propaganda que ha tapizado el país de imágenes y de broza igualitaria, acompañado de un típico estilo contestatario, que gasta a mano suelta y no rinde cuentas de nada ni a nadie.

El último informe del Centro Gumilla sobre los valores del venezolano, arroja que los sectores C, D y E, están cansados de la falsa socialista y en especial, de un afán discriminatorio, autoritario y proselitista. Este segmento pide a gritos, "no se burlen más de nosotros". Hoy el pueblo rechaza el ven a mí que tengo flor a cuenta de un paquetico de arroz, otro de algodón, más curitas y mertiolate. Pues nada, entonces habrá que decir, gracias Presidente-sic-por hacerles corresponder, que con el socialismo jamás saldrán del barrio.